Me alegro de verte (Dick Grayson)

Tema: Me alegro de verte (Dick Grayson) Dom Ago 05, 2012 9:12 am

Estoy en mi casa, con mi padre; tengo 19 años y es de noche. Llaman a la puerta y yo corro a abrir, pensando que será algún recado para mi padre por algo del trabajo, o mi compañera que viene a buscarme para ir a las clases de yoga, pero lo que me espera al otro lado no es un oficial con gesto serio y mirada amable que me pregunta por mi padre ni mi compañera risueña y entusiasmada, sino un rostro blanco con maquillaje dantesco y una sonrisa siniestra que me dispara nada más verme. Quedo tendida en el suelo, sangrando. No siento más que dolor por todo mi cuerpo, pero eso no es lo peor de todo, sino la certeza de que jamás podré volver a andar...

Me despierto sobresaltada en mi cama y me revuelvo el pelo con una mano; otra vez he soñado con la noche en la que el Joker me disparó hace tres años, y con esta ya van tres veces esta semana. El apartamento está en silencio salvo por mi respiración agitada, parece que Alysia, mi compañera de piso, ha vuelto a salir temprano para trabajar. Me dirijo al baño para darme una ducha, y cuando salgo por fin he conseguid espantar los fantasmas de mi sueño, al menos de forma temporal, y estoy serena nuevamente. Me visto con tranquilidad y desayuno con calma, pensando en lo que me espera: un día más en busca de trabajo que nuevamente terminará en fracaso, ya que no soy apta para el trabajo que deseo porque me falta experiencia y estoy sobrecualificada para los demás trabajos. ¿Para eso me había dejado el alma y la piel sacándome la carrera de psicóloga forense antes incluso de alcanzar la mayoría de edad? Sin embargo, por muy desalentador que pueda parecer no me rindo, sigo insistiendo en buscar trabajo para poder mantenerme por mi cuenta y no tener que depender de mi padre para siempre.

A media mañana decido tomarme un pequeño descanso y parar en un puesto callejero a por algo que tomar: apenas he desayunado al levantarme porque el sueño/recuerdo me quitó el apetito, y tras otra entrevista fallida necesito algo de glucosa para subirme los ánimos. Me detengo en un puesto de perritos y aguardo en la fila a que llegue mi turno, estoy hambrienta.

Invitado

Había sido una noche muy larga.
Durante toda la noche me había dedicado a perseguir a todo un grupo de mafiosos. Además de ser un número bastante grande de enemigos, se encontraban en puntos muy separados, así que había sido una larga persecución de villanos por toda la ciudad de Gotham para, la mañana siguiente, tener que continuar con mi trabajo de agente de policía.

Realmente aquello era un trabajo duro, durmiendo a penas unas pocas horas para el resto del tiempo estar persiguiendo y luchando con personas que van en contra de la ley. Demasiado duro.

A penas podía mantener los ojos abiertos mientras Tommy se encontraba conduciendo el coche patrulla. Lo único que conseguía mantenerme despierto era la continua vibración y ruido que creaba el motor ya bastante viejo y mis dedos, los cuales no dejaban de frotar los extremos internos de mis cansados ojos para, seguidamente, mirar la hora en el reloj del coche.

8:37

Aun es muy temprano... Me faltan más de tres horas para terminar mi turno. No sé si podré aguantar tanto tiempo si de repente surge cualquier altercado.

–¿Te desvelaste?–La pregunta del sonriente Tommy hizo que dirigiese mis ojos hacia él, pareciendo que-aunque sus ojos no se apartaban de la calzada-se había dado cuenta de mi cansancio–¿Ayer no dormiste?

–No, no mucho...–Musito finalmente mientras que en mi rostro se dibujaba una media sonrisa. Como siempre, la curiosidad carcome a mi compañero rubio de pelo de punta.

–¿Y quién es la afortunada?

Aquella nueva pregunta hace que termine mirándole algo extrañado.
No, se está equivocando. No se acerca ni por asomo a la razón por la que me mantengo todas las noches despierto sin descansar. Pero, al menos, puedo estar tranquilo en aquel aspecto ya que no sospecha nada.

–No, tan solo fue una mala noche en la que no he podido dormir. Nada más–Verdades a medias. No le he mentido pero tampoco le he dicho la razón por la que no he estado metido en la cama de mi apartamento.

–Mm... De acuerdo...

Entonces, el vehículo se detuvo, estacionando justo al lado de la acera. Cuando miro por la ventana veo que aun no estamos en la comisaría, sino unas manzanas bastante más lejos de esta. Pero relativamente cerca de mi casa.

–Venga, vete a descansar un rato. Después de todo, has trabajado bastante durante esta semana

La amabilidad de Tommy ha conseguido que el asombro se plasme en mi pálido y cansado rostro, no sabiendo que decir o hacer. Realmente, aquello me estaba tomando por sorpresa y sería la primera vez que no haría mi trabajo...

–Venga, no te preocupes. Me las podré arreglar sin la ayuda del gran policía Richard John Grayson–La risa y el tono burlón de la voz grave del rubio me hace ver que no tiene problema en dejarme marchar–No le diré nada al Comisario, tranquilo.

Un "gracias" termina por salir de mi boca mientras abro la puerta ya algo gastada-la cual cuesta un poco abrir por completo, teniendo que hacer un poco de fuerza- y salgo al exterior con mi cazadora azul del cuerpo de policía por encima. Tommy era un buen tipo...

8:43

Hace apenas un minuto Tommy ha salido por fin a continuar con la patrulla matinal a la ciudad, habiéndome quedado solo en la calle para que me pudiese marchar a dormir algunas horas más a mi apartamento. Sin perder más tiempo, comienzo a caminar por la calle con ambas manos en los bolsillos. Como de costumbre, en la oscura ciudad de Gotham hace algo de frío. Las espesas nubes grises no dejaban pasar demasiados rayos del Sol, lo cual se hace notar.

Pero, mientras continuo caminando, mi cuerpo sugiere algo antes de que llegásemos a casa: No había comido nada desde la noche anterior antes de salir a patrullar la ciudad de noche como Nightwing ya que al volver al apartamento ya era demasiado tarde para desayunar. Entendía que mi estómago comience a gruñir al percibir el olor que desprende el puesto de "Hot Dogs".

Finalmente, no puedo resistirme a dirigirme a la fila y ponerme el último en la col...

Barbara...

Mi rostro se ha vuelto serio al ver a la pelirroja justo en la cola del puesto.

No es solo que sea la sobrina del Comisario Gordon y que, al verme justo aquí, sepa que me estoy escapando del trabajo; sino que además nuestro último encuentro no es que hubiese terminado bien que se diga...

–Hola, buenos días...

No creo que lo más sensato sea pasar de largo como si no la hubiese visto porque estaba completamente seguro de que ella sí me había visto. Pasar de ella seguramente haría enfadarla y, posiblemente, hacer que me guardase rencor.

No tengo más remedio que saludarla, aunque la situación sea algo tensa.

Tema: Re: Me alegro de verte (Dick Grayson) Dom Ago 05, 2012 1:18 pm

La cola del puesto de perritos avanza lentamente, parece que el encargado no es precisamente un manitas y le lleva su tiempo preparar cada uno; delante de mí hay otras cinco personas, lo cual sale a unos quince minutos de espera, como poco. Mientras aguardo en la fila del puesto lanzo una mirada al reloj para comprobar la hora que es. Por suerte para mí, aún falta cerca de dos hora y media para la siguiente entrevista, y llegar hasta las oficinas me llevará menos de media hora, así que no me encuentro en un apuro y puedo esperar lo que haga falta. Mi estómago, por otra parte, no está tan de acuerdo con la afirmación: apenas he desayunado un café y una tostada antes de salir a la entrevista en el archivo de la biblioteca, el mismo en el que había estado trabajando unos años atrás, antes de convertirme en Batgirl y todo lo que eso conllevó, y han pasado ya unas cuantas horas desde entonces. Estoy hambrienta.

Para distraer mi mente de esos pensamientos lanzo una mirada a mi alrededor, a los transeuntes, cada uno perdido en sus propios pensamientos y en sus propias vidas, algunos dirigiéndose a sus puestos de trabajo, otros como yo en busca de uno con más o menos suerte. Un par de minutos pasan y otro cliente es despachado, ahora solo quedan cuatro personas delante de mí. Continúo contemplando las idas y venidas de la gente sin prestarles atención realmente cuando un rostro conocido llama mi atención.

Richard.

¿Qué está haciendo él aquí? Teniendo en cuenta la hora y cómo va vestido, debería estar de patrulla en un coche con su compañero al lado, así que intuyo que está escaqueándose del trabajo quizás con la intención de dormir un poco más, a juzgar por sus ojeras. Está serio, pero esa suele ser su expresión habitual, y estoy segura de que me ha visto, a juzgar por la tensión que percibo en su mandíbula. No le culpo por ello: la última vez que nos encontramos la cosa no terminó demasiado bien. Fue cuando vino a verme durante mi primer caso tras recuperar la movilidad, apenas un mes atrás; vino a comunicarme su preocupación y la de Batman, dimos una vuelta en mi moto y para calmar sus dudas de si estaba en condiciones, jugamos un poco al pilla-pilla...hasta que para mí dejó de ser un juego y se convirtió en algo más serio, en una prueba. Consideré que Richard estaba juzgándome, me llené de rabia y le ataqué, estuvimos peleando un rato hasta que él logró detenerme. Había sido muy considerado conmigo, dándome mi espacio cuando le pedí que me dejase hacer aquello sola, y eso solo hace que me sienta aún más culpable por cómo le traté.

-Buenos días, Richard -le saludo cuando se sitúa detrás de mí, con una sonrisa tímida.- ¿Cómo estás?

Sé que le debo una disculpa, sé que obré mal, pero soy demasiado orgullosa como para decirlo en voz alta...al menos por el momento. Otro hombre acaba de ser atendido, y todos avanzamos un puesto más.

Invitado

Me ha saludado y muestra una sonrisa. Al menos, no está tan alterada como en nuestro último "choquecillo" y eso no está tan mal-supongo-.

–Bueno...–Comienzo a hablar después de posicionarme detrás de ella. Aunque ya hiciese algo de frío de por si en la oscura Gotham, haberme encontrado con Barbara ha hecho que un escalofrío recorriese mi médula al no saber como actuar ante ella, lo cual ha hecho que me encoja de hombros para que el cuello de la chaqueta azul llegue un poco más arriba–Ya sabes, algo cansado del duro trabajo.

Mientras continuo hablando, intento improvisar una media sonrisa mientras mojo mis labios con algo de saliva-que ya había aumentado el número de esta tras oler la comida- a la vez que agachaba un poco la cabeza para que no percibiese las notables ojeras que se encontraban justo debajo de mis cansados y caídos ojos.

–Y ahora me encuentro aquí esperando poder desayunar algo. Y parece que tú también.

Sin duda alguna, mis chistes habían empeorado considerablemente desde que trabajaba solo y no como Robin; y más si los soltaba estando tan tenso y nervioso-aunque, aun así, seguro que seguían siendo mejores que los de Barbara-, pero intento romper un poco el hielo mientras río de forma leve y me rasco la nuca. Aquello parecía lo más sensato que podía hacer para poder volver a hablar de nuevo con ella. Después de todo, aquella había sido la primera chica que me había besado mientras era el pupilo de Bruce además de que había terminado por enamorarme de ella... Aun así, intento librarme de aquellos pensamientos.

–Y, bueno... ¿Qué te cuentas tú? Hace tiempo que no te veo.

Tema: Re: Me alegro de verte (Dick Grayson) Lun Ago 06, 2012 8:22 am

Me giro a medias en la fila para mirar a Richard de frente, total no corre prisa que me vuelva ya que el siguiente cliente aún no se ha decidido por qué tomar y parece que aún tardará un rato más; suerte que no tengo prisa... Estudio el rostro de mi amigo de la infancia, tratando de distinguir algún rastro de herida o de cualquier problema, quizás algo de resentimiento por lo que sucedió en nuestro último encuentro, pero además de la tensión en la línea de la mandíbula no percibo nada más en su rostro serio. A excepción, claro está, de unas enormes ojeras que trató de ocultarme en vano, seguros testigos de otra noche más sin dormir y arriesgando su vida con su disfraz de Nightwing. Satisfecha con mi exploración le miro a los ojos y esbozo una nueva sonrisa.

-Imagino que debes estar agotado...¿cuánto dormiste anoche? -pregunto, rozando con un dedo sus ojeras, sabedora de que la respuesta será un número ridículamente pequeño de horas...si es que realmente durmió, no me extrañaría nada que hubiese ido a trabajar sin pegar ojo.

Richard siempre ha sido un poco caótico y descuidado en la forma en que lleva su vida, se desvive por los demás y por velar de la ciudad y eso le lleva a ponerse en riesgo más de una vez. Me preocupa mucho que un día se pase de la cuenta y termine herido o algo peor: puede llegar a ser un chulito de tres al cuarto, pero es un buen chico, amable y encantador; fue esa misma amabilidad la que hizo que me fijase en él y que sea mi primer amor de la infancia...que quizás aún no he superado del todo.

-¿Yo? Como siempre, supongo -me encojo levemente de hombros.- Sigo buscando trabajo, pero siempre me responden lo mismo: no tienes la experiencia requerida o estás demasiado preparada, no hay término medio -lanzo una nueva mirada a la cola y veo que el indeciso de antes ha conseguido decidirse por fin.- Ya solucioné el problema de la última vez que nos vimos, aunque supongo que eso ya lo sabrás -añadí, haciendo referencia al caso de Mirror. Tomo aire, insegura de como seguir- creo que te debo una disculpa, por lo que pasó. No debí golpearte, lo siento.

Invitado

–No tantas como debería.–Una leve risa termina de salir entre mis labios al ver que se había dado cuenta de mis largas noches de insomnio por culpa de mi doble vida. Bruce al menos podía quedarse a dormido todas las mañanas por su estatus como multimillonario y no tenía que preocuparse tanto por "WayneTech." debido a que personas-como el Señor Fox-se dedicaba a llevar la empresa por buen cauce. Yo no tenía tanta suerte ya que debía también asistir a mi puesto de trabajo como Policía–Y sí, escuché que tu problema se terminó por arreglar. Me alegro.

De repente, ocurre lo último que pensaba que iba a pasar: Barbara me estaba pidiendo disculpas de lo que ocurrió aquella noche en la azotea del edificio, aquel extraño ataque que le dio repentinamente cuando terminé por pillarla. Desde entonces, no sabía el porque pero guardaba en una pequeña caja el mechón pelirrojo que ella misma se había cortado de su cabello con uno de sus batarangs.

No sé si sonreír al ver que Barbara estaba empezando a madurar o sorprenderme al ver que no era la misma de siempre. Realmente, no sé que cara tengo ahora mismo tras escuchar aquellas palabras.

–Bueno...–Titubeo. No sé que decir, así que lo único que puedo hacer es comenzar a rascarme la nuca indeciso. No sé que decir porque ni me había planteado que aquella situación llegase tan pronto–No te preocupes, tampoco fue para tanto.

Estaba de suerte. El hombre que se encontraba delante de Barbara acaba de recoger su pedido y finalmente le toca pedir a la sobrina del comisario. Por el momento, podré pensar en algo ingenioso para poder hablar sobre aquel incidente que había puesto nuestra relación algo tensa.

–Aun así, te perdono. Entiendo que estuvieses alterada con aquel asunto y ver que no confiábamos del todo en ti. Yo también me sentía algo molesto y dolido cuando Bruce no me veía capaz para ciertas cosas...

Tema: Re: Me alegro de verte (Dick Grayson) Lun Ago 13, 2012 12:53 pm

Frunzo el ceño, molesta conmigo misma. Sé que le debía esa disculpa a Richard por cómo le traté la última vez, por la forma en que rechacé su ayuda y le maltraté, pero al mismo tiempo siento que acabo de traicionarme a mi misma con esta disculpa. Yo soy una persona orgullosa, demasiado a veces: ni siquiera cuando estaba en silla de ruedas quería ayuda o compasión de ninguna clase. ¡Si mi silla de ruedas ni siquiera tenía asideros para que nadie pudiese empujarme! Tampoco ahora quiero compasión ni piedad, ni nada que se le parezca. Culpo de este momento de debilidad a que tengo las barreras bajas por culpa de toda una mañana de entrevistas de trabajo infructuosas y del hambre acuciante, junto con el aburrimiento de llevar casi media hora esperando en la cola por un maldito perrito caliente.

Por fin ha llegado mi turno, y mientras hago mi pedido, agradezco mentalmente la interrupción de este momento tan extraño. Esta pequeña pausa me permite recobrar las barreras como siempre, y cuando me aparto un paso para dejar a Richard espacio para pedir, vuelvo a ser la Barbara de siempre.

-No es bueno saltarse las horas de sueño -reprendo a mi amigo.- ¿Qué pasa si te quedas dormido en un momento importante? Podrías perder un ascenso por quedarte dormido cuando el jefe te llama... -me burlé.

De nuevo frunzo el ceño cuando escucho sus palabras. Sé que yo misma abrí la puerta a este tema, pero no me agrada seguir dándole vueltas al mismo asunto. No quiero recaer en ese momento de debilidad de antes.

-Sí bueno, al menos todo ha pasado ya -respondí, tratando de dar el tema por zanjado.- El caso está cerrado y ya no hay dudas.

Me acomodo la melena sobre el hombro, y mis dedos rozan un mechón más corto que los demás: es el mechón que me corté con uno de mis batarangs tras la discusión, en un impulso. Fue un acto infantil y extraño, pero sentí el impulso de hacerlo al recordar aquella conversación que habíamos tenido de niños en los tejados de la Mansión.

-Bueno, señor agente, por la hora y por su aspecto apurado intuyo que está algo lejos de su puesto de trabajo -comento con cierto tono malicioso.- ¿Tratando de recuperar el sueño perdido? -aventuro.

Invitado

Ya pensaba que era demasiado raro...

Cuando volví a sacar el tema de conversación de nuestra última "charla", ella reconstruyó su inquebrantable barrera de seriedad. Había vuelto a ser la solitaria e introvertida Barbara que se había convertido en aquellos últimos años desde el incidente con el Joker y parecía que no iba a flaquear otra vez como hacía un momento.

Entonces volvió a salir el tema de que hacía allí cuando tendría que estar trabajando. Y Babs dio en el clavo: Recuperar el sueño perdido. Era necesario que descansase unas horas si no quería verme en problemas, no solo por la broma de Barbara de quedarme dormido si algún superior me llamase, sino por el hecho de estar cansado mientras hiciese la patrulla y no pudiese rendir al cien por cien. Eso sí que sería un gran problema...

–Bueno... Sí, así es. Tommy me ha dicho que me vaya a dormir.–Terminé por asumir mientras me dirigía hacia el pequeño puesto cuando la pelirroja me dejó vía libre–Después de todo, tú deberías saber como se siente uno si no duerme sus horas necesarias...

Sin duda alguna, Barbara tendría que ser una de aquellas personas que podrían comprenderme, el hecho de llevar una segunda vida en secreto para la mayoría de los habitantes de Gotham, el hecho de vivir al límite la gran mayoría de los días para detener a los psicópatas más locos de la ciudad, ... Sí, ella debía entenderme ya que había vuelto a asumir el manto de Batgirl y había vuelto a las andadas.

Sin hacer esperar más al cocinero del puesto, le pedí un Perrito con Cebolla frita y ketchup y un café solo para, acto seguido, dirigir mis cansados y oscuros ojos a los de Babs para seguir hablando con ella.

–Así que espero que no le digas al Comisario Gordon que me estoy escapando de mi puesto–Bromeé, plasmando una media sonrisa en mis labios.

Tema: Re: Me alegro de verte (Dick Grayson) Vie Ago 24, 2012 12:10 pm

Doy un mordisco a mi perrito caliente para tratar de calmar un poco mi ligera incomodidad, que achaco a la falta de glucosa en sangre y a mi pequeño momento de debilidad de antes. Hace tiempo que no tomo uno, y eso unido al hambre voraz que siento me hace emitir un pequeño gemido. Espero que nadie más lo haya notado, aunque es poco probable: Richard está ocupado haciendo su pedido y las demás personas de la cola están cada uno en su propio mundo.

Asentí con la cabeza a sus palabras, probablemente las personas en esta ciudad que podían comprender a qué se refería Richard, y por fortuna -o por desgracia, eso nunca estaba del todo claro- yo me contaba entre ellas. No es lo mismo el agotamiento producido por una noche sin dormir trabajando en un centro comercial o algo parecido, que el que una noche de patrulla como "vigilante".

-Tienes que descansar más -bufo.- A Alfred no le hará ninguna gracia cuando vuelva enterarse de que no has estado durmiendo el tiempo suficiente, ya sabes -me encojo ligeramente de hombros.

Alfred se está tomando unas merecidas vacaciones, y eso significa que ambos estamos libres de sus visitas semanales para traernos medicinas, vendas e incluso comida, y para revisar que todo esté en orden. Había tenido que organizarlas de forma que Alysia no esté en casa nunca cuando él viene, porque sería algo demasiado difícil de explicar. Y lo cierto es que sus visitas son algo que agradezco mucho, tanto por el cariño que me hacen sentir como por los repuesto que me trae, porque a pesar de tener memoria eidética tiendo a olvidar algunas cosas básicas, como comprar gasas o una botella nueva de alcohol porque he gastado la última.

Doy un nuevo mordisco al perrito, hambrienta, y sonrío a medias. Me paso dos dedos por los labios como cerrando una cremallera, hago como que cierro con llave y lanzo la llave invisible por encima de mi hombro.

-Mis labios están sellados, agente Grayson -prometo.- Pero tienes que prometerme que te irás a dormir en cuanto te acabes eso -señalo su perrito con un gesto de la cabeza.- Nada de excursiones para hacer acrobacias ni nada parecido. Si no...tal vez reconsidere mencionar ciertas cosas la próxima vez que vaya a visitar a mi padre.

Invitado

Mientras termino recibiendo mi pedido, sonrío de medio lado mientras doy un sorbo al café caliente que termina por despertarme. Hablar de Alfred ha conseguido que termine sonriendo, ya que-al igual que Barbara y Bruce- echaba de menos al mayordomo que me había cuidado desde que empecé a formar parte de la familia.

Había pasado un tiempo desde que se había marchado de vacaciones, dejando a Bruce al "cuidado" de Selina. Aun así, no habíamos perdido el contacto con él ya que alguna que otra vez mandaba un e-mail con alguna que otra foto de su merecido descanso por su gran labor tanto en la Mansión Wayne como en la Batcueva.

–No quiero ni pensar como se pondrá Al al ver el estropicio que tengo montado en el loft–Río mientras me aparto de la cola para que el siguiente detrás de mi ya pueda pedir, empezando a caminar con Barbara a mi lado–Aunque... Seguramente Al habrá visto cosas peores que mi desorden.

Entonces, mientras le doy un mordisco a la jugosa y recién hecha salchicha rodeada de la crujiente cebolla, ella me advierte que si me voy a hacer acrobacias por Gotham en vez de descansar, se lo dirá al Comisario Gordon.

–No, tranquila. No tenía pensado hacer esas locuras ahora–Advierto después de tragar el trozo que había en mi boca–Pero... Si quieres y si no tienes nada que hacer ahora... Puedes acompañarme y quedarte un rato allí.

Esto último lo digo no muy convencido. Aunque nos hubiésemos perdonado al fin, Barbara no accedería a venir a pasar un rato en el loft tan rápido. Después de todo, nunca ha sido una chica muy abierta desde su accidente...

Tema: Re: Me alegro de verte (Dick Grayson) Sáb Sep 01, 2012 11:43 pm

Suspiro al pensar en Bruce y la Mansión sin Alfred: la minina no es la persona más estable del mundo y miedo me da lo que pueda llegar a hacer en la Mansión, ya que Bruce no parece demasiado dispuesto a ponerla bajo control. A mi mente regresan imágenes del día que tuve que quedarme a dormir en la Mansión porque las cañerías de mi apartamento habían reventado y el apartamento estaba inhabitable: la minina había campado a sus anchas por todas partes, haciendo y deshaciendo como le parecía y...ehm...siendo poco discreta en sus intentos de intimidarme y sus avances con Bruce.

Suelto una risita al escuchar su comentario: puede que Selina tenga lo suyo, pero desde luego Richard no se queda atrás en cuanto a orden respecta; estoy segura de que escarbando lo suficiente podríamos llegar a encontrar la civilización perdida de Atlantis entre sus cosas.

-Terminarás por matarle de un disgusto -bromeo.- No estoy tan segura...¿cuándo fue la última vez que ordenaste algo, a ver?

Echamos a caminar y doy un nuevo mordisco a mi perrito caliente, lanzando una rápida mirada a mi reloj para comprobar la hora y asegurarme de que no voy a llegar tarde a la entrevista, y me relajo al comprobar que aún tengo tiempo de sobra. Asiento al escuchar que me promete que no irá a hacer ninguna locura ahora: Richard es un hombre muy responsable, pero a veces su sentido del deber y sus deseos de ayudar pueden con su sentido común, y siempre me preocupa que pueda hacer alguna locura y termine herido o peor. No me esperaba que me invitase a acompañarle a su piso: acabamos de hacer las paces, pero las cosas aún están algo tensas entre nosotros; además, nunca suelo ir a casa de nadie a no ser que tenga algún motivo de fuerza mayor, prefiero salir a la calle, donde me siento menos presionada y menos agobiada. Recuerdo un tiempo en el que escuchar el timbre de la puerta me provocaba ataques de pánico...

-Vaya agente Grayson, ¿no cree que primero debería invitarme a cenar? -bromeo nuevamente.- ¿O es un intento de que ordene tu piso? -río.- Tengo una entrevista de trabajo dentro de un rato, pero te acompañaré a la puerta, quiero asegurarme de que de verdad te vas a casa -comento, rechanzando su invitación de la forma más adecuada que se me ocurre.

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